Friday, August 11, 2006

Un lugar en ninguna parte


Según dicen los expertos, en estos momentos tengo los pies sobre la reserva de petróleo más grande del mundo pero en realidad me preocupa más el galopante calor que se burla del generador de aire y amenaza con asarnos en esta carpa blanca. Afuera, una torre que perfora y saca el oro negro del suelo. Es el unico atractivo, casi que provoca tomarse la respectiva foto.
Mención aparte merece el gigantesco bosque de pinos. Al inicio, cuando veníamos, me emocioné de verlo y hasta tomé un par de fotos pero 45 minutos después de ver sólo pinos ya había perdido cualquier resquicio de ilusión.
Mi neurosis por la telefonía celular también logró un pronto protagonismo, mientras digitel ni asomaba cabeza, movistar y movilnet se pasaban en un baile de señal perdida que a la vez casi me convertía en bailarin intentando adoptar posiciones casi de yoga para lograr una limosna de conexión.
No he mencionado que un discurso político sirve de fondo a la redacción de estos párrafos. A mi mente vino el nombre en español de aquella peli Running on empty, que calificaría perfecto ahora: Un lugar en ninguna parte.
No creo que valga la pena mencionar que me levante a las 02.45 para tomar un taxi, luego un bus al aeropuerto, un bus al avión, el avión hasta maturín, otro bus a Morichal y luego llegar a este sitio sin nombre ya referenciado, que a todas estas no está en Monagas sino en Anzoátegui.
Apenas pasaron 4 horas para llegar hasta acá desde Caracas y aunque parezca eterno, apenas el reloj marca las 13.34 pm. Menos vale decir que el retorno del avión desde Maturín está previsto para las 20.00 hora local.
Les dije que me encanto este viaje?
PD: Luego de hacer el mismo trasbordo de regreso, adicionando colas para llegar al aeropuerto de Maturín y en la conocida Trocha, arribé a las 23.45 a casa.

1 Comments:

At 9:02 AM, Blogger fototeco said...

uy :S ahora que te den un día libre!

me imagino el calor :S

sólo faltan las fotos :D

 

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